En sus tres años de gestión, la paraestatal acumuló una pérdida neta histórica de más de 1 billón de pesos, la deuda alcanzó 3 billones y la producción retrocedió.
EMEEQUIS.- El desplome de los precios internacionales del crudo en 2015 significó un deterioro importante en los indicadores financieros y operativos de Petróleos Mexicanos (Pemex). Fue el último año con Emilio Lozoya al frente de la paraestatal, pues se marchó en febrero de 2016, en medio de cambios en el gabinete de Enrique Peña Nieto.
El exdirectivo de la paraestatal, ahora detenido en España, dejó tras de sí una pérdida neta histórica de más de un billón de pesos en sus tres años de gestión al frente de Pemex (2013-2015).
Uno de los indicadores que prendió las alarmas en la empresa productiva del Estado fue la pérdida del valor en sus activos de largo plazo (pozos, ductos, propiedades, plantas y equipo), pues al cierre de 2015 la disminución se ubicó en casi 478 mil millones de pesos, 1,771% mayor que en 2013 (primer año de gestión de Lozoya), cuando fue de 25.6 mil millones.
Si bien la propia empresa explica en su reporte financiero de ese año que el impacto de la caída en los precios del petróleo, así como la variación en el tipo de cambio tuvieron mucho que ver, también la reducción en gastos para el mantenimiento de estos activos fijos contribuyó a su deterioro.
NI CON CUATRO YACIMIENTOS
El área que más presentó una pérdida de valor de sus activos es justamente Pemex Exploración y Producción, por 394.4 mil millones, lo que representó 82%.
Los pozos petroleros se depreciaron 250 mil millones de pesos y las plataformas marinas 95.4 mil millones.
En 2013, la mezcla mexicana de exportación promediaba un precio de más de 90 dólares por barril, mientras que en 2015 bajó a 43 dólares por barril, una caída de 52% , que se tradujo en un fuerte golpe para los mercados energéticos a escala mundial.
La extracción de crudo en 2013 promedió 2.5 millones de barriles diarios. Bastaron dos años con Lozoya para que en 2015 se situara en 2.2 millones, 12% menos.
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En su último año, Emilio Lozoya anunciaba con bombo y platillo el descubrimiento de cuatro yacimientos de hidrocarburos en aguas someras en el Litoral de Tabasco, que fue calificado como el mayor hallazgo en cinco años, con un potencial de una producción incremental de al menos 200 mil barriles diarios de crudo.
No obstante, la producción de petróleo mantuvo un ritmo decreciente en los años posteriores.
Por otra parte, los activos de Pemex Refinación se deterioraron en 75.7 mil millones, los de Logística en 5.8 mil millones, los de Etileno en 1.2 mil millones.
PÉRDIDA NETA HISTÓRICA
Como un círculo vicioso, al tener un alto deterioro de todos esos bienes, en 2015 se tuvo una pérdida neta histórica, que ascendió a 712.4 mil millones de pesos.
Y durante el periodo que estuvo Lozoya al frente de la empresa productiva del Estado las pérdidas netas suman 1.1 billones de pesos (170 mil millones en 2013 y 265 mil millones en 2014).
A la par de esto, la deuda total de Pemex alcanzó los 3.1 billones de pesos en 2015, un incremento de 41% respecto a 2013. Este pasivo incluye el financiero de largo y corto plazo, el laboral, con proveedores, entre otros.
Mientras que las ventas totales se redujeron de 1.6 billones de pesos a 1.1 billones. Todo esto sucedía en plena transformación de la empresa derivado de la reforma energética.
Con este poco plausible cierre de resultados Lozoya se despidió de Pemex en febrero de 2016 y entró al quite José Antonio González Anaya, quien venía de reestructurar financieramente al IMSS.
Uno de los primeros problemas que le explotó a González Anaya, a un mes de su entrada, fue una gran deuda con proveedores, que llegaba a más de 140 mil millones de pesos por la prestación de diferentes servicios.
NO ERA NEGOCIO
Otro de los hechos por los que se ha señalado y puesto bajo la lupa al exdirector de Pemex fue la compra de Agronitrogenados y Fertinal, para su división de fertilizantes, a un sobreprecio, pues eran prácticamente inservibles.
En el último reporte financiero dictaminado de Pemex (2018), se reconoció un deterioro en el valor de los activos por 4.2 mil millones de pesos que corresponde a las plantas de ácido nítrico, nitrato de amonio y UAN 32.
“Que fueron adquiridas y cuya rehabilitación no ha iniciado. Por los compromisos financieros de esta compañía para los próximos cinco años, no se podrá desarrollar un plan alternativo para rehabilitar estos activos ociosos”, reconoce la empresa productiva del Estado.
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Cuatro años después de su salida de Pemex, Emilio Lozoya está detenido en España, por presuntamente haber recibido sobornos de la empresa brasileña Odebrecht y con un inminente proceso de extradición a México.
Además, otra de las líneas de investigación que tiene la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) de la Secretaría de Hacienda, que encabeza Santiago Nieto, sobre la gestión de Lozoya en Pemex, es el presunto desvío de 83 millones de pesos, a través de contratos otorgados a empresas fantasma, se reveló en enero pasado.
El canciller Marcelo Ebrard dijo que ya se están agilizando las gestiones para que Lozoya rinda cuentas ante la justicia mexicana, donde enfrentaría cargos por soborno, lavado de dinero y asociación delictuosa. “La Secretaría estará lista para hacer esa solicitud en tiempo y forma”, informó.
@ptcervantes
Sobre las filtraciones de sus charlas privadas, asegura: “El audio no es auténtico y presenta indicios de alteración y modificación, con lo que se demuestra que se utilizan recursos públicos para tratar de destruir a la oposición”. Mientras tanto, Layda Sansores aún tiene más dardos en su contra.
El tema de la Guardia Nacional se reactiva en la Suprema Corte. Arturo Zaldívar y Yasmín Esquivel defienden que siga bajo el mando de la Sedena. Mientras que Juan Luis González Alcántara y Norma Piña son partidarios de anular la iniciativa de AMLO.
