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EMEEQUIS.– Esta tarde un juez de control vinculó a proceso al exprocurador general de la República, Jesús Murillo Karam, por los delitos de desaparición forzada, tortura y contra la administración de la justicia, relacionados con la desaparición los 43 estudiantes de la Escuela Normal Rural de Ayotzinapa “Raúl Isidro Burgos” la noche del 26 y madrugada del 27 de septiembre de 2014.
Lo anterior pese a que la defensa del exprocurador pidió al juez desestimar las pruebas que presentó la Fiscalía General de la República (FGR) para imputarlo por esos delitos. El imputado aseguró que la investigación de la “verdad histórica” realizada bajo su cargo es la mejor de todas y nadie la ha podido “tirar”.
Al exprocurador se le vinculará a proceso por el delito de desaparición forzada de los 43 estudiantes, tras presentar la “verdad histórica”. En el delito de tortura se le acusa del ejercicio de dicho acto contra los seis detenidos por el caso Ayotzinapa. Además, se le imputa por su responsabilidad contra la administración de justicia por manipular y perturbar las pruebas en la investigación.
Además, con el objetivo de evitar que Jesús Murillo Karam pueda evadir la justicia, el juez determinó que el imputado llevará su proceso en prisión preventiva. Asimismo, otorgó un plazo de 90 días para concluir con las investigaciones complementarias.
Desde la mañana de este miércoles se dio continuidad a la audiencia para determinar la vinculación a proceso de Murillo Karam, quien fungió como titular de la Procuraduría General de la República (PGR) durante el sexenio del expresidente Enrique Peña Nieto.
Minutos antes de iniciar la audiencia, la cual estaba programada a las 8 am, Xavier López García y Antonio López, abogados de Murillo Karam, así como Vidulfo Rosales, representante legal de los familiares de estudiantes desaparecidos de Ayotzinapa, además de Santiago Aguirre, del Centro de Derechos Humanos, Miguel Agustín Pro, quien acompaña a las víctimas, ingresaron a los juzgados de distrito de procesos penales federales en donde se realizó la audiencia.
Tras ser detenido el pasado viernes 19 de agosto en su casa de la colonia Lomas de Chapultepec, el sábado 20 el juez de Control del Centro de Justicia Penal Federal, Marco Antonio Fuerte Tapia, decidió que Murillo Karam quedaría en prisión preventiva en el Reclusorio Norte de la Ciudad de México. Esto con el objetivo de evitar que el exprocurador huyera mientras se determinaba su vinculación a proceso, lo cual se definió hoy.
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Tras casi ocho años de la desaparición de los 43 estudiantes normalistas, Jesús Murillo Karam es el primer alto mando que ha sido detenido por dicho crimen de Estado. A sus 74 años, el exprocurador se encuentra en vilo de pagar por los actos que le imputa la Fiscalía.
Por su parte, el pasado lunes en su conferencia matutina, el presidente Andrés Manuel López Obrador, retomó un video que anteriormente había sido presentado por el fiscal general de la República, Alejandro Gertz Manero. Tras dicha acción, el mandatario nacional consideró que Murillo Karam se inculpa a sí mismo.
En el video, Murillo Karam presentó la “verdad histórica” de los hechos ocurridos, a la vez que reconoció su total responsabilidad sobre la investigación. En esa primera investigación sobre la desaparición de los 43, el exprocurador sostuvo que “los estudiantes normalistas fueron privados de la libertad, privados de la vida, incinerados y arrojados al Río San Juan”.
Además, en su conferencia matutina de este miércoles, el titular del Ejecutivo federal consideró que Murillo Karam podría acogerse al “criterio de oportunidad”, una figura legal mediante la cual se permite a un testigo declarar bajo protección o con negociación de penas más bajas.
LA DEFENSA DE MURILLO KARAM
Una vez iniciada la audiencia alrededor de las 9:30 de la mañana, la defensa del exprocurador aseguró que “no hay una sola prueba que compruebe que tenía conocimiento” sobre la tortura practicada a las personas detenidas por la desaparición de los estudiantes normalistas. En este sentido, pidieron prescribir el cargo por delito de tortura.
La defensa de Murillo Karam adelantó que presentarían en esta nueva audiencia pruebas que iban a dejar en claro lo que sucedió en el caso de la desaparición de los 43 estudiantes de Ayotzinapa. López García mencionó que los datos de prueba que ofreció la defensa de Murillo Karam este miércoles serían documentos y fotografías.
Entre otras estrategias, los abogados defensores argumentaron que la FGR utiliza como pruebas frases de conferencias, realizadas por Murillo Karam, fuera de contexto. Además, apuntaron que no hay pruebas de que en Guerrero se llevara a cabo la reunión para construir la “verdad histórica”.
Por su parte, el primer mandatario, durante su conferencia matutina, profundizó en el tema. “Cómo se defiende si se inventa una situación, un hecho lamentable, si se instrumenta todo un montaje”, dijo. El presidente consideró que la situación “es indefendible”.
López Obrador explicó que se ocultó la verdad en lugar de buscar y castigar a los culpables. En el mismo tenor, pidió a Jesús Murillo Karam revelar quién dio la orden para construir la “verdad histórica”. “Los jueces van a escuchar la opinión de todos, ojalá y hablen, que todos hablen si dicen que no es nada más Murillo Karam, pues que Murillo Karam diga quién le dio la orden”, apuntó.
En su momento, al declarar en favor de su propia defensa, Jesús Murillo Karam aseguró que la investigación realizada por la PGR “es la mejor que se ha hecho, aunque haya tenido muchas fallas”. Asimismo, sostuvo que ninguna otra investigación ha podido “tirar” la que se hizo a su cargo.
LA VERDAD HISTÓRICA
Tras lo acontecido entre la noche del 26 y madrugada del 27 de septiembre de 2014, la extinta Procuraduría General de la República (PRG) se encargó de investigar a profundidad cómo sucedieron los hechos de la Noche de Iguala. De tal forma, el 27 de enero de 2015, Murillo Karam, en compañía de Tomás Zerón, extitular de la Agencia de Investigación Criminal de la entonces PGR, presentó la “verdad histórica” sobre la desaparición de los 43 estudiantes normalistas.
El exprocurador aseguró que los estudiantes fueron privados de la libertad, de la vida, incinerados y arrojados al río San Juan, en Cocula. “Esta es la verdad histórica de los hechos, basada en las pruebas aportadas por la ciencia, como se muestra en el expediente, y que ha permitido ejercitar acción penal en contra de los 99 involucrados, que han sido detenidos hasta hoy”, declaró el entonces titular de la PGR.
Asimismo, Murillo Karam advirtió: “No hay una sola evidencia de que haya intervenido el Ejército, ni una sola; las mismas declaraciones iniciales de los que hoy dicen que el Ejército fue (responsable de la matanza) lo acusaban (al principio) de omisión (por no intervenir), las mismitas (personas). No hay una sola, una sola evidencia de la participación del Ejército, ni siquiera había un grupo razonable de soldados en el lugar”.
En el mismo informe, se explicó que la causa de desaparición de los jóvenes estudiantes fue que el grupo criminal Guerreros Unidos, los había confundido con una de sus bandas rivales, los Rojos. Razón por la cual fueron asesinados e incinerados y, posteriormente, arrojados al río San Juan. De acuerdo con la misma versión, los normalistas habrían sido detenidos por policías corruptos de Iguala y entregados al crimen organizado.
La “verdad histórica” construida durante el sexenio de Peña Nieto, sería posteriormente desmentida con investigaciones alternas del Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI), el cual fue designado por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) a petición del gobierno mexicano.
Finalmente, el pasado 18 de agosto, el subsecretario de Derechos Humanos, Alejandro Encinas, presentó el informe de la Presidencia de la Comisión de la Verdad y Acceso a la Justicia del Caso Ayotzinapa. En este último texto, se concluye que la desaparición de los 43 normalistas fue un crimen de Estado, en el cual se involucraron los tres niveles de gobierno, así como altos mandos de diversas instituciones; entre ellos, además de Murillo Karam, el actual secretario de Seguridad Ciudadana de la Ciudad de México, Omar García Harfuch, quien negó su participación.
POLÍTICOS MANIFIESTAN APOYO A MURILLO KARAM
Pese a su detención por ser uno de los personajes implicados en el Caso Ayotzinapa, Jesús Murillo Karam, quien toda su vida ha militado en el PRI, ha sido defendido por distintos personajes políticos, principalmente de este partido.
Miguel Ángel Osorio Chong, quien fungía como secretario de Gobernación durante el atentado contra los 43 normalistas, expresó: “Conozco a Jesús Murillo Karam y vi que en su actuar como servidor público se condujo con apego a derecho y tuvo la determinación de enfrentar los delitos por los que ahora se le acusa”.
El actual gobernador de Hidalgo, Omar Fayad, también expresó su solidaridad con el exprocurador y deseo que las autoridades lleven un debido proceso adecuado. Por su parte, la senadora Claudia Ruiz Massieu también respaldó al implicado: “Jesús Murillo Karam ha sido un hombre público profesional, con genuina y acreditada vocación de servicio. Ojalá que la ley impere en las actuaciones judiciales y las autoridades procedan por encima de las presiones e intereses partidistas” expresó.
Paco Olvera, exgobernador de Hidalgo, tuiteó sobre el tema: “La detención del Lic. Jesús Murillo parece más un acto político que un acto de justicia. Las familias de las víctimas en Ayotzinapa merecen justicia, no una cortina de humo (…) Expreso toda mi solidaridad al licenciado Jesús Murillo, quien siempre demostró capacidad y calidad en su cargo. Estoy seguro que librará este asunto porque se mantienen los principios de justicia en la nación”, aseguró.
El dirigente nacional del PRI, Alejandro Moreno, se pronunció en favor de Jesús Murillo. “Es inaceptable que el Gobierno Federal persiga a exfuncionarios públicos que buscaron resolver y procurar justicia en un caso tan relevante y triste como el de los estudiantes de Ayotzinapa”, apuntó. Agregó que la detención “es una señal de que el Gobierno no busca dar justicia a los familiares de los jóvenes ni certeza al país (…) buscan distraernos de las crisis de inseguridad, inflación, desempleo, pobreza y de la crisis en el sistema de salud pública del país”.
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